Aunque parezca increíble, existen muchas personas que emplean la brujería para dañar a los demás.
Lo que ignoran es que metiéndose en energías negativas no solo hacen daño a otros, sino, a sí mismos.
Tarde o temprano el mal que se esparce, se devuelve multiplicado por 10 a quién lo hace. Esto es una ley de la vida y no un castigo divino.
Quizá muchos ignoren esta ley, pero dios sabe que lo que se siembra se cosecha.
Es por ello, que Jesús, según dice en las escrituras Mateo 13:24-30, en una ocasión se dirigió a sus discípulos para contarles la siguiente parábola:
Lo que ignoran es que metiéndose en energías negativas no solo hacen daño a otros, sino, a sí mismos.
Tarde o temprano el mal que se esparce, se devuelve multiplicado por 10 a quién lo hace. Esto es una ley de la vida y no un castigo divino.
Quizá muchos ignoren esta ley, pero dios sabe que lo que se siembra se cosecha.
Es por ello, que Jesús, según dice en las escrituras Mateo 13:24-30, en una ocasión se dirigió a sus discípulos para contarles la siguiente parábola: